ANALFABETO DIGITAL



España es el líder mundial en el uso de emoticonos relativos a la fiesta, con la sevillana y los iconos que llevan confeti como favoritos WF. En 2001, año de los atentados del 11-S, fue Ground Zero; en 2011, cuando emergieron los movimientos de los indignados, Occupy; en 2014 la palabra más usada en el mundo de habla inglesa, según Global Language Monitor, ya no fue una palabra, sino un ideograma que representa un corazón, es decir, un emoticono, el icono que expresa emociones.
El emoji es la lengua más escrita del mundo, la nueva lingua franca. Pasó de los niños a los adultos, o a los adultos niños, porque de hecho, el uso de emoticones es un problema de falta de crecimiento personal, o una moda pasajera más, como la de los gintonics, los hipsters, o los vermuts. De hecho, más que modas, son síntomas de la decadencia de una sociedad aburrida, hedonista y superficial, instalada en la banalidad de la nada.

Ayer recibí un SMS de Movistar en que me ofrecen gratis un Smartphone por ser de Fusión. Ni de coña lo pienso ir a buscar, el Smartphone tiene internet y por lo tanto Whatsapp, el cual me convertiría en un zombie a punto de desaparecer misteriosamente como en el vídeo.

Prefiero ser un analfabeto digital.

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