La salida de Iván Espinosa de los Monteros de la primera línea de Vox ha sido una caída más de todos los que participaron en la famosa foto de Colón. Aquel evento que se celebró el 10 de febrero de 2019 en la madrileña plaza de Colón juntó a los principales rostros políticos de los partidos de la derecha española de entonces.
Una imagen que quedó grabada en el imaginario político del país como la unidad del bloque que prometía ser la oposición al Gobierno de un Pedro Sánchez que había salido vencedor tras la moción de censura a Mariano Rajoy. Sin embargo, cuatro años después, solo quedan «en pie» cuatro políticos de esa primera fila de la «España unida». Moncloa.com.
Aunque esta instantánea fuera una de las imágenes del 2019, en la actualidad, ha resultado ser un recuerdo de los que cayeron sin haber podido «derrotar al sanchismo». En la manifestación no solo estuvieron presentes los representantes de Vox, Ciudadanos y PP, también estuvieron acompañados por Foro Asturias, UPN, PAR y UPyD. Sin embargo, poco queda de esa primera fila de la que el representante nacional de Ciudadanos fue el primero en caer. Albert Rivera, tras el batacazo del 10N de ese mismo año, dejó todos sus cargos del partido después de perder más del 80% de los diputados que habían conseguido siete meses antes.
Junto a la caída del candidato del partido naranja, también cayeron las formaciones minoritarias. Algunos no están ya en política y otros vieron desaparecer su formación, como es el caso de Cristiano Brown, líder de UPyD, partido que a los diez meses de la instantánea anunció su disolución. Otros como Foro Asturias, PAR y UPN ese mismo año desaparecieron del panorama nacional o fueron en coalición con el PP, y actualmente su presencia se ha reducido al ámbito autonómico o local, siendo Carmen Moriyón la que más se ha beneficiado de todos esos representantes de partidos minoritarios, ya que es la actual alcaldesa de Gijón, gracias al apoyo de PP y Vox en la ciudad asturiana. Por otro lado, las figuras fuertes que hicieron de esa manifestación de la derecha española un evento multitudinario fueron Alberto Casado y Javier Maroto, una de sus manos derechas en el partido. A pesar de la fuerza que inspiró el PP en ese evento en la plaza de Colón, pocos meses después el que era el vicepresidente de Casado destacó por un presunto fraude de Ley al cambiar su padrón para conseguir su asiento en la Cámara Alta y el Partido Popular le destituyó de su cargo y le relegó al Senado como portavoz.
Por otro lado, el líder del Partido Popular, Alberto Casado, aguantó como representante del PP en el Congreso de los Diputados a pesar de haber conseguido el peor resultado de la formación y estuvo presente en la oposición hasta que se enfrentó a su homóloga en la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, por el contrato que hizo la presidenta de la capital a su hermano. El resultado fue la caída de Casado en 2022 y la llegada del actual representante del partido, Núñez-Feijoo.
Esta imagen también cambió el panorama político en aquel momento. El presidente de Vox, Santiago Abascal, fue el representante que más reforzado salió de ese acto. La formación de ultraderecha logró obtener en las elecciones generales de ese mismo año 22 escaños en abril y 52 diputados en la repetición electoral de noviembre, lo que le posicionó como tercera fuerza parlamentaria. En la actualidad, su papel en la derecha se vio reforzada en las elecciones autonómicas y, dos meses después, derrumbada con la pérdida de 13 diputados en el Congreso de los Diputados.
Actualmente, de las personas que acompañaban al líder de Vox en la foto de Colón, a nivel nacional, solo queda él. Mientras que la directiva relegó Rocío Monasterio y a Ortega Smith al ámbito autonómico y local de la capital, Iván Espinosa de los Monteros ha decidido abandonar su posición en el partido y dejar la primera fila del partido de Vox. Así, el que era el portavoz de Abascal en el Parlamento ha sido el último en caer de la famosa foto de Colón, de la que ya solo queda Abascal en el terreno político nacional. Como en Gran Hermano, sólo puede quedar uno, grande y libre, Abascal.
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