Gobernantes efímeros. El ex primer ministro francés Sébastien Lecornu ha dimitido esta semana después de ostentar el cargo desde el 9 de septiembre, pero solo catorce horas después de haber formado gobierno, lo que convierte a su ejecutivo en uno de los menos longevos de la historia de su país y que evidencia la inestabilidad política por la que atraviesa el país que preside Emmanuel Macron.
La historia, sin embargo, es rica en gobernantes fugaces. También en Francia, Alexandre Ribot ostentó la presidencia del gobierno en varias ocasiones; en una de ellas, en junio de 1914 durante solo cuatro días. Édouard Daladier también ejerció este cargo varias veces, pero en 1934 durante solo siete días antes de dimitir. Pero el récord absoluto de la política gala corresponde al duque de Montemart que solo tuvo esta responsabilidad durante unas horas, pues su mandato fue interrumpido por la revolución de 1830 que expulsó del poder a Carlos X.
A escala mundial probablemente el gobernante más fugaz sea Pedro Lascuráin Paredes, que fue presidente interino de México durante 45 minutos en 1913, “prácticamente no le dio tiempo más que para firmar con su nombre completo”, ironizaba esta semana Politico: Pedro José Domingo de la Calzada Manuel María Lascuráin Paredes.
Si la lista se amplía a monarcas, el rey más efímero también hay que buscarlo en Francia. Se trata de Luis XIX, hijo de Carlos X, que tras la abdicación de su padre en el marco de la revolución de 1830 se mantuvo en el poder durante 20 minutos, tiempo suficiente para renunciar a su vez a la corona. - Fèlix Badia en la vanguardia.
Luis Felipe de Portugal, alias " el breve" también estuvo 20 minutos " moralmente" con ese título. Su padre, el rey Carlos I, y él sufrieron un atentado. El padre, el rey Carlos I, murió en el acto y Luis le sobrevivió esos veinte minutos.
Y para cachondeo el que se trajeron en la Primera República española: en menos de un año cuatro presidentes: Figueras, Pi y Margall, Salmerón y Castelar.
Estanislao Figueras es el autor de la frase: Señorias, estoy hasta los cojones de todos nosotros, y se exilió a Francia.
También tenemos la república de Schrödinger de Puigdemont, que duró 8 segundos, y se exilió a Waterloo.
Sí, la de Puchi también fue buena. Jejeje.