Y un domingo a media mañana te encuentras con esta fotografía que es como un puñetazo en el estómago, que te remueve la conciencia, y te hace sentir pequeño y miserable quejica al ver este esfuerzo, esta voluntad de estos niños, mientras tú te quejas de cincuenta mil naderías de nada. La imagen pertenece al documental 'Camino de la escuela' de Pascal Plisson, del que os dejo el tràiler.