Teóricamente, eliminando de raíz todas las religiones y su nefasta influencia, acabaríamos con las guerras y conflictos entre los pueblos, pero ya se ocuparía la estulticia de los homínidos de inventarse otros motivos para practicar su deporte favorito: Matar por matar. De todos modos, a largo plazo la eliminación del problema - la religión - posiblemente daría resultado en educar a las criaturas lejos de la contaminación de esta. No estaría por demás respetar y aplicar el mensaje de Jesús de Nazaret, que poco tiene que ver con todas estas sectas que tanto daño han hecho, hacen, y continuarán haciendo, me temo.