A Ernest Lluch, cuando fue ministro de Sanidad los funcionarios le pusieron el apodo de 'el abominable hombre de las 8'. Se ve que el primer día en que se presentó al Ministerio como nuevo titular a las ocho en punto, ni siquiera habían abierto las puertas. Su manera de ser de persona trabajadora y mañanera le permitió en muy poco tiempo dejar huella en el sistema español de salud al consagrar el derecho universal a la asistencia sanitaria y desvincularla de la cotización a la Seguridad Social. 
Ernest Lluch pertenecía a una especie desgraciadamente extinguida, 'los socialistas de Cataluña '. Ernest Lluch fue asesinado por ETA en el parking de su casa el 20 de Noviembre del año 2000, dicen que la ultima persona que habló con él y que le acompañaba cada día, fue Lluís Foix. 
Cuidado con los pseudo-homenajes a ETA como el de hoy, enmascarados bajo palabras como democracia y libertad . Estos demócratas amantes de las libertades asesinaron a más de 800 ciudadanos españoles, y entre ellos a Ernest Lluch. No hay que olvidarlo.

Recuerdo perfectamente como supe de su assinato: eran las seis menos cinco de la mañana cuando al conectar la radio del coche me enteré de la noticia. Recuerdo también como si fuera ayer las palabras de Gemma Nierga pidiendo diálogo al terminar la gran manifestación de Barcelona, ​​y le hicieron caso, salvo los de siempre que la criticaron en ese momento y han puesto todas las zancadillas que han podido al proceso de diálogo con la banda terrorista.
Son ellos, los mezquinos, los miserables, los que lo anteponen todo y a los que les vale todo con tal de alcanzar el poder. No era de esos Ernest Lluch, por eso lo mataron. Él hablaba de diálogo, de compromiso, de generosidad y esto a ambos lados del conflicto hay una serie de siniestros personajes que no les interesaba ni les interesa a estas alturas, nada.


Veo a menudo el pequeño homenaje a la memoria de Ernest Lluch en forma de placa en el Parc Catalunya de Sabadell, estaba bajo un árbol, pero ahora la han rodeado y junto hay un parque infantil para los niños, con tirolina incluida. Quizá algún día un niño preguntará a su padre o madre, quien era este señor, espero se acuerden y les expliquen que hay gente que pierde la vida para buscar la paz y el entendimiento entre los pueblos.

Un destacado dirigente abertzale declaraba años mas tarde que el asesinato de Lluch había sido un error, el reconocimiento de este llegaba tarde, demasiado tarde.