"El obispo de Alcalá de Henares, Juan Antonio Reig Pla, ha acusado al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de insensatez ... para retirar la ley del aborto y de estar" infectado "por el 'lobby' gay . la suspensión de la contrarreforma del aborto amenaza de movilizar la Iglesia y como abanderado ha aparecido con estilo inconfundible; en su opinión, el PP es "un partido liberal, informaron ideológicamente por el feminismo radical y la ideología de género, y 'infectado', como el resto de los partidos políticos y sindicatos mayoritarios".
Por el obispo de Alcalá, la defensa del aborto es diabólica y esta decisión del Gobierno del PP abre a los católicos españoles la posibilidad de un "nuevo inicio", en el que ha planteado "suscitar una respuesta civil organizada y capaz de movilizar las conciencias "y" hacer un llamamiento a promover iniciativas políticas que hagan suya, integralmente, la doctrina social de la Iglesia". Además, pone a la misma balanza el aborto con la esclavitud: "El camino será largo y difícil, ya pasó con la abolición de la esclavitud. La maduración de las conciencias no es empresa fácil, pero nuestro horizonte, por la gracia de Dios, es el de la victoria del bien", manifestó Reig Pla.
Este individuo, este hipócrita fariseo no me merece ningún respeto, es un desgraciado, y quizás se le debería hacer la prueba de alcoholemia, o pasarlo por un psiquiatra para que le examine. Este individuo está enfermo, y además, habla de un aspecto en el que él y su secta no tienen ni pueden decir nada, no es de su negociado, puesto que de entrada son ellos los primeros que no procrean desobedeciendo el mensaje de Jesús: 'creced y multiplicaos', y esta patulea como máximo lo que hacen es tener alguna querida a escondidas o dedicarse a violar niños, en nombre de dios eso sí. El Papa Francisco debería cesar inmediatamente a este subproducto, este error de la naturaleza, que no se como, pero ha llegado a Obispo. "
Se puede hablar del aborto, estar a favor o en contra, pero nadie tiene derecho a decidir sobre el hecho,ni Iglesia ni Estado, sólo la futura no futura madre, y basta. Este dios inexistente y los farsantes que lo representan no pintan nada ni pueden decidir nada, de hecho, sus bienes terrenos deberían ser expropiados y retirados todos los privilegios que tienen del concordato con la Santa Sede. Ni agua a la gran vergüenza eterna de la humanidad.
Sobre el aborto hablaba en este mismo blog hace seis años ...
"Tengo que reconocer que no soy a nivel personal partidario del aborto, pero no por cuestiones religiosas, y posiblemente ni siquiera éticas, simplemente no me parece bien de la misma manera que a veces no sabes porque te apetece unas cosas y otros no, porque unas decisiones determinadas te repugnan y otras simplemente las comprendes y justificas. y no lo digo por la letanía de los católicos intransigentes, que si es matar o asesinar a un feto, y tonterías demagógicas de esas que se eroguen en erigirse ellos en el bastión de un comportamiento ético que tan poco han practicado, y practican y que además nos quieren imponer. El problema del aborto tal y como yo lo veo es que nadie tiene ningún derecho a interferir, ni el Estado, ni la Justicia y menos aún la Iglesia, porque es ésta una decisión personal de responsabilidad absoluta de la mujer embarazada.
Pese cuando he dicho y como afirmaba al principio no soy partidario porque un embrión, un feto es ya vida, pero no vida dada por Dios, vida a secas, y no me parece bien el hecho de abortar, ahora, no soy yo nadie para condenarlo o criminalizar como hacen sobre todo los católicos, aparte de que deberían preocuparse de lo suyo, pero estos católicos quieren controlar la vida de todos e imponer su ética y moral a todos, que iríamos arreglados también si les hiciéramos caso. No son precisamente lo que se dice un ejemplo a seguir a lo largo de su historia de más de dos mil años, porque si alguien entiende de aniquilar son ellos y cuando se han puesto, se han bien puesto.
He visto nacer a mis hijas, las tres, y el milagro de la vida, aquella menudencias que sale por un agujero angosto, que parece imposible que pueda pasar y saca primero la cabeza y poco a poco va saliendo y tarda una eternidad en arrancar el llanto, y te la dan, y la coges como si fuera una delicada figura de porcelana y la sientes latir sobre ti, y esa cosa pequeña, arrugada, sucia todavía, roja, que ya tiene su propia entidad, y digámoslo claro, fea de narices, es como un pequeño gran e inexplicable milagro que pasa a formar parte de tu vida para siempre.
Tanto que nos preocupamos en buscar cuál es el sentido de la vida, y quizá sea éste, tener hijos, que nos dan limpios y al paso que vamos, netos que te darán bisnietos. Nacer, reproducirse y morir, para perpetuar la especie, que siendo poco, bien mirado es mucho.
No estoy a favor del aborto, pero tampoco estoy en contra, no soy quién para juzgar ni decir que tiene que hacer nadie en una cuestión tan personal e importante como esta, pues quien da la vida es quien decide arrebatarla, si le parece o se ve en la necesidad, y no debemos olvidar que la vida la da la mujer, la relación de una pareja, y no Dios, si acaso la naturaleza, que es quien al fin y al cabo, también nos acaba matando."
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