Si todo va según lo previsto, hoy a partir de las 8:05pm Mariano Rajoy no conseguirá los votos suficientes para ser investido Presidente del Gobierno Español. Hay voces - entre ellas la de Felipe Gonzalez - que insinúan que si Rajoy hiciera un Artur Mas, se podrían abstenerse varios diputados socialistas lo que sacaría al Pp del callejón sin salida en el que está y del que tanto se cachondeaban cuando estábamos aquí en la misma situación.
El problema sin embargo, no es personalista, o ¿es que quizás si en vez de Rajoy ponen a otra persona, cambiaría algo en la forma de mal gobernar del partido Popular?. ¡No! No es Mariano Rajoy el problema, el problema es el partido Popular en su conjunto, lleno de imputados y de sospechosos habituales, es el partido todo él, el que no debería poder gobernar, pero tampoco es que la alternativa muy difícil de unir PSOE, PODEMOS Y C'S, ofrezca demasiadas garantías, por no decir ninguna.
De hecho, todos los partidos son el problema, y en este juego de los disparates que es la política española, quien más desea unas terceras elecciones, de hecho el único que las desea, es Mariano Rajoy, sabe y ya cuenta que en diciembre puede alcanzar la mayoría absoluta, sólo con el apoyo de lo que quede de Ciudadanos, antes de desaparecer.
Hay voces que piden la abstención ciudadana en señal de protesta de cara a esta tercera convocatoria electoral, una protesta que demuestre el rechazo de los ciudadanos hacia la chusma parlamentaria que sufrimos, pero es un error, la derecha siempre vota, incluso a veces, los abuelos de los geriátricos y los muertos lo hacen.
El problema sin embargo, no es personalista, o ¿es que quizás si en vez de Rajoy ponen a otra persona, cambiaría algo en la forma de mal gobernar del partido Popular?. ¡No! No es Mariano Rajoy el problema, el problema es el partido Popular en su conjunto, lleno de imputados y de sospechosos habituales, es el partido todo él, el que no debería poder gobernar, pero tampoco es que la alternativa muy difícil de unir PSOE, PODEMOS Y C'S, ofrezca demasiadas garantías, por no decir ninguna.
De hecho, todos los partidos son el problema, y en este juego de los disparates que es la política española, quien más desea unas terceras elecciones, de hecho el único que las desea, es Mariano Rajoy, sabe y ya cuenta que en diciembre puede alcanzar la mayoría absoluta, sólo con el apoyo de lo que quede de Ciudadanos, antes de desaparecer.
Hay voces que piden la abstención ciudadana en señal de protesta de cara a esta tercera convocatoria electoral, una protesta que demuestre el rechazo de los ciudadanos hacia la chusma parlamentaria que sufrimos, pero es un error, la derecha siempre vota, incluso a veces, los abuelos de los geriátricos y los muertos lo hacen.
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