Relacionar los incendios de Galicia con la cuenta atrás del conflicto entre los gobiernos de España y Cataluña se veía venir, y precisamente vino en un tuit de un raro espécimen de la política como es Esteban González Pons. El PP no ha tenido una buena semana. La pachorra exhibida por Mariano Rajoy, que contribuyó a calmar el fin de semana, fue saboteada por la actitud incontinente de Pablo Casado relacionando Companys con Puigdemont y por Xavier García Albiol, que pasó por Preguntes freqüents en TV3 con la única intención de mostrar un vídeo lamentable que, según él, confirma el maléfico adoctrinamiento de las escuelas catalanas. Un video que es de una escuela de Cambrils donde escenificaron el asedio de la ciudad por Felipe II allá por el mil quinientos. A todo esto no sé si acabarán de aplicar el artículo 155 que nadie sabe exactamente cómo se aplica, lo que quiere decir que el Pp lo aplicará como le salga de las gónadas.
La noticia buena es que un brujo fantasma se ha ido a vender loteria a Navarra, y que mejor no tener el seguro en Segur-Caja, no parecen de fiar. Por cierto, sólo es una pregunta que me hago: Supongamos que ya tenemos la República, ha pasado un tiempo y todo funciona con normalidad y muchas Empresas han vuelto: El Gobierno puede nacionalizar la Caixa?. Me parece que ganas no les faltarian.
Dicen desde la prensa de Madrid que la Fiscalía va a por Trapero, ojo, yo me lo pensaría dos veces o tres, mucho cuidado con ir hinchando gónadas de según quien, que no está solo. Mientras, el crucero animado tú-tú que nos cuesta 300 mil euros diarios, por el momento no se va, a no se que deje de flotar un día de estos. Podrían salir cada día a dar una vuelta por el puerto como si de una golondrina se tratara, al menos los uniformados no aburrirían tanto, incluso los podrían llevar a comer una paellita en Cambrils.
En toda esta pandemia que parece será la República de Cataluña, y todos estos mensajes del miedo, de empresas que se van, el PIB que decrece, el turismo que baja, etc etc, diría que el auténtico miedo, el pánico, es que el problema no sería para Cataluña sino para España, como ya lo decía Victoria Prego, no se si con esta intención. Pasarán cosas, y no todas serán malas, y más de uno habrá de tragarse sus palabras, sus propios vómitos, espero no ser yo,  pero que acabe ya, como sea, pero que se acabe, que estamos hasta los cojones de todos nosotros.l