Una sociedad no se define como desarrollada por la riqueza que tiene sino por la pobreza que no tiene - Jorge Majfud.
Antes de la gran revolución civil habrá una profundización de la crisis de este orden obsoleto. Esta crisis será en casi todos los ámbitos, desde el orden político hasta el económico, pasando por el militar. La Superpotencia es actualmente muy frágil debido a su recurso militar, con el cual ha minado el arma más estratégica de la antigua diplomacia […] no podrá resistir un contexto crecientemente hostil porque su economía, base de su poderío militar, se debilitará en proporción inversa. Hoy está en condiciones de ganar cualquier guerra, con o sin aliados, pero los sucesivos triunfos no podrán salvarla de un progresivo desgaste. El resultado inmediato será una gran inseguridad mundial, aunque ésta se superará con la revolución civil. En este momento de quiebre, Occidente se debatirá entre un mayor control militar o en la desobediencia civil, la cual será silenciosa y anónima, sin líderes ni caudillos.
La democracia representativa representa lo reaccionario de nuestro tiempo. Pero la democracia directa no se dará por ninguna revolución brusca, liderada por individuos, ya que es, por definición, un proceso cultural donde la mayoría comienza a reclamar y compartir el poder social. Cuando esto ocurra, los parlamentos del mundo serán lo que hoy en día son los reyes de Inglaterra: un adorno oneroso del pasado, una ilusión de continuidad. De la misma manera que no es por casualidad que la mayoría de los jugadores de baloncesto sean hombres altos, ni que la mayoría de los travestís sean homosexuales. Tampoco es casualidad de que la mayor parte de aquellos que ostentan el poder sea gente ambiciosa e incompetente. Es decir, no es por casualidad que el mundo esté gobernado por gente que no debería gobernarlo. Y así nos va.
Lo que está claro es que estamos antes el fin de una época. Con o sin contiunuidad. Todo apunta en esa dirección.
ResponderEliminarSaludos.
Cayetano, ya cantaba Dylan años ha que los tiempos estaban cambiando. Celebro que hayas vuelto de tu exilio literario.
ResponderEliminarSaludos.