La historia de Amina Arraff, la blogger siria defensora de los derechos de los gays pretendidamente detenida por el régimen de Bashar al Asad, ha sido una falsificación. Los principales medios de comunicación internacionales publicaron entrevistas con la supuesta activista y se hicieron eco de su detención por las informaciones publicadas en el blog A Girl Gay in Damascus. Ayer, Tom MacMaster, un estadounidense que estudia en Escocia, ha colgado un post en el blog discupándose por haberse inventado el personaje. El impostor se defiende argumentando que sólo pretendía "iluminar a la audiencia occidental de las luchas de la gente que vive en pleno levantamiento en Oriente Próximo". La comunidad gay, sin embargo, ha reaccionado con contundencia. "Por su culpa, señor MacMaster, muchos de los activistas reales del movimiento gay estamos en el punto de mira de las autoridades sirias", manifiesta Daniel Nassar en el blog Gay Middle East.
Esta noticia o falsa noticia de esta supuesta activista, es una más de las que se han dado por una gran parte de los medios sin comprobar la fuente. ¿Cuantas se deben colar del falsas al cabo de los días? Ya entiendo que los bloggers no certifiquemos la veracidad de una noticia, no tenemos ninguna obligación de hacerlo mientras citemos la fuente, pero esta fuente, al ser profesional, si que se debería tomar la molestia de comprobar la veracidad de la noticia antes de publicarla. Y es que a menudo muchas de estas noticias no se nunca si me las tengo que creer seriamente o publicarlas en absurdidades. Y esto no es bueno, porque es el triunfo de la desinformación, de la banalización de la noticia en la que prima más la rapidez a la hora de publicarla y el titular llamativo que no su confirmación.
El torero Ortega Cano chocó con otro vehículo y el conductor del mismo falleció mientras el torero resto vive aunque sigue en coma. ¿Alguien recuerda el nombre del conductor que murió en el accidente?. !No! apenas se ha hablado de él, una nota breve el primer día y toda la atención se ha centrado en la figura del torero. !Ah! el conductor muerto se llamaba Carlos Parra Castillo "El belga" y tenía 48 años, si me tengo que fiar de la información de El País.
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