La oposición al gobierno denuncia que el conflicto en Bahrein ha costado la vida a 70 personas, miles han ido a prisión y decenas han sido detenidas. Dos integrantes del equipo Force India abandonaron Bahrein antes de ayer, después de sufrir un episodio inquietante entre los graves conflictos políticos que vive el país desde hace 14 meses. El auto en que ambos viajaban desde el autódromo de Sakhir hasta el hotel de la capital, Manama, fue detenido en medio de un enfrentamiento entre revolucionarios y policías y una bomba molotov cayó cerca del vehículo. Los miembros de Force India llegaron nerviosos a su lugar de alojamiento y decidieron marcharse del convulsionado Bahrein. Además, el equipo MRS, de la categoría telonera Porsche Supercup, optó por dejar la nación por una cuestión de seguridad.
Todo esto le da igual al Sr. Ecclestone, el Gobierno de Bahrein paga con petrodólares generosamente para que una pandilla de vagos monten su numerito de cochecitos de carreras, y le importa un bledo los muertos y los incidentes del país. Es éste uno de los contrasentido de esta sociedad decadente, la obscenidad de la opulencia en medio de la evidencia de la lucha de un pueblo oprimido por un Gobierno dictatorial encabezado como diría un Secretario de Estado Norteamericano: por nuestro hijo de puta, pues le han puesto ellos, como Saddam Hussein y tantos otros. En este caso los nombres son: Hamad ibn Isa Al Khalifah, el rey y el primer ministro, su tío Khalifa bin Salman Al Khalifa.