Sorprende que alguien se sorprenda de la revelación de Edward Snowden de que el Gobierno de los Estados Unidos espíe a dios y su madre en todas las comunicaciones que hay en la red, espionaje que hacen también los Británicos, los Rusos, los Chinos, los Japoneses y cualquier Gobierno que tenga la posibilidad de hacerlo. Me parece de una enorme hipocresía como han hecho algunos de escandalizarse. No saben en qué mundo viven. Si publicais un escrito donde aparezca la palabra Mossos d'Esquadra y tenéis un contador de visitas como dios manda, veréis que pronto recibiréis una visita de su web, esto ya lo explicaba el ínclito Federico Jimenez los Santos, por eso muchos escribíamos Fedeguico a ver si colaba. Sinceramente, a mí lo que me sorprendería, y mucho, es que algún Gobierno no espíase, seguramente por inocente no sería de fiar, como en la ciudad alegre y confiada de Don Jacinto Benavente, pues todo eso lo hacen por nuestro bien y nuestra seguridad, aunque luego los terroristas atenten dónde y cuando quieran, dado que estos Gobiernos o sus ilegales representados dichos servicios secretos no se enteran de nada y se pierden en medio de ridículos vericuetos como cuando se intenta romper la olla con un palo y los ojos vendados. Y es que ya lo decía Marco Antonio hace una temporada: que ridículo y extraño resulta aquel que se sorprende de todo lo que pasa en la vida.