Sea porque estamos a finales de verano o porque el personaje era lo que era y tenía su pasado, ha generado bastante controversia el hecho de que el Ayuntamiento de Barcelona quiera dedicar una calle de la ciudad a Juan Antonio Samaranch. El Alcalde Trias ha matizado en declaraciones a Rac1 que de hecho la propuesta hace un año que está en estudio y se ha tomado a petición de una serie de entidades deportivas de Catalunya; se ha quejado el alcalde que el Pp haya filtrado la noticia y ha manifestado que si acaso se está estudiando poner su nombre en el Paseo Olímpico, que podría pasar a llamarse Paseo Olímpico Juan Antonio Samaranch.
Esto de la nomenclatura de las calles de Barcelona o de cualquier otro pueblo o ciudad, tiene el problema de que muchos de los nombres no pasan la prueba del algodón; Samaranch, tiene el pasado que tiene, pero tiene también un pasado más cercano en el que realmente hizo mucho por las olimpiadas de Barcelona. Quizás la solución más razonable para acabar de una vez con estas discusiones bizantinas, sería hacer como en Nueva York y numerar las calles, paseos y avenidas, así se acabaría de una vez por todas con el problema.