DECÍAMOS AYER ...

Después de meses acaparados por la consultay su entorno mediático, volvemos a la coridianeidad dei dia a dia y podemos volver a hablar de las csas pequeñas, aspecto que bastantes han seguido cultivando però que uno habia dejado un poco al lado.  Miquel hablaba el domingo del cierre de la fàbrica d'olis i sabons E.Figols en Barcelona, al lado de la Boqueria, donde fabricaban el 'jabón Lagarto'. Este jabón forma paret de la infància de muchos de nosotros, hace 4 años, le dediqué este escrito.

Publicidad de Jabón Lagarto

"En el año 1950 del siglo pasado, cuando la gente todavía trabajaba el sábado por la mañana, en muchas casas no había aún agua corriente, y la gente una vez a la semana iba a lavarse en A "Cal RAL" que le llamaban así pues este era el coste 0'25 céntimos de peseta que en catalán era un "Ral", real en castellano, que daba derecho a ducharse con jabón y toalla. No había en las casas lavadora, la cosa iba de lavadero jabón el lagarto y picador. Lavar en el "safareig" "la pila" consistia en fregar el jabon lagarto por la ropa atizándola con el picador, y luego a base de aclarar más o menos quedaba limpia, o al menos desinfectada.

No había tampoco nevera, como mucho, algunas que iban con barras de hielo para más o menos enfriar, pero no nevera eléctrica. Por supuesto tampoco había lavavajillas, ni trenes de lavado de automóviles, ni apenas automóviles, ni campos de golf, televisores, moviles y afortunadamente no existia la TDT. No había tampoco piscinas y poca agua se envasaba. En el año 1950 en Cataluña éramos poco más de 4 millones de habitantes. Parece que haya pasado mucho tiempo (58 años) tiempo más que suficiente para haber previsto (en gran parte así se hizo) la posibilidad de falta de agua de boca que dicen ahora. No es el tema exactamente de este comentario, nunca se habían encontrar tantas soluciones a un problema como en quince días se ha hecho con el agua. Por lo menos lo que quería recordar que en cincuenta y pocos años, nuestra calidad de vida ha aumentado y mucho en casi todos los aspectos, y en cambio lo único que sabemos hacer es quejarnos constantemente de todo y de todos. Nos hemos vuelto mucho más egoístas e insolidarios, sólo hay que ver el comportamiento de diferentes sectores no ya políticos menos sociedad civil con la cuestión esta del agua.

Como decía, todo nuestro entorno ha mejorado en comodidades y bienestar para hacernos la vida más fácil y agradable. Pero me pregunto si somos conscientes, si sabemos disfrutar y todos estos adelantos han servido de algo. Parece ser que no, que cada vez somos más infelices, y que la memoria es huidiza y nadie quiere recordar un pasado mucho más duro y difícil, quizá porque al mirar atrás nos damos cuenta que en este cambio de estado hemos perdido demasiado sábanas de la colada y una buena parte de nuestra inocencia."

Quizá deberíamos volver al picador y al jabón Lagarto para ser un poco felices.