Cuando he ido esta mañana a comprar tabaco para mi señora, el estanquero tenía unos letreros colgados con este lema: Multa de 12.000 euros para regalar mecheros. Le he preguntado de que iba la cosa y me lo ha explicado. No es ya el Ministro del Interior el que está enfermo y es irrecuperable, el de Hacienda  le va a la zaga y a poca distancia, esta gente se han vuelto locos, que se les ha ido la olla, ¡vaya!, a continuación os lo cuento, y como he dicho otras veces, no es una noticia de el Mundo Today, ni el guión de una película de Berlanga, es la España casposa, cañí, y olé ...

 "Los niveles confiscatorios en España alcanzan las cotas más altas. Regalar un mechero por comprar un cartón de tabaco le puede salir caro al estanquero. Tradicionalmente, los estanqueros regalan un mechero al cliente con la compra de un cartón de tabaco. El cliente va a tener fuego sí o sí y no tendrá que buscarlo revolviendo los bolsillos para encontrar el propio. Este gesto puede costar a partir de ahora 12.000 euros como mínimo al estanquero, una sanción que podrá ser impuesta por agentes de la Guardia Civil y miembros de Hacienda.
La venta de tabaco es un monopolio estatal que perdura en el tiempo, más cuando de cada paquete Hacienda se embolsa el 70%, es decir, 7 de cada diez euros. La normativa sobre la actividad promocional de labores del tabaco se lleva al límite.
De esta forma, entregar un mechero a un cliente por comprar 10 paquetes de golpe, o por ser un cliente habitual que se ha quedado sin fuego, podría conllevar una sanción mínima de dos millones de pesetas, 12.000 euros, que podrá ser recurrida en la justicia, según recoge OK diario. La sanción es de tal calibre, que el estanquero tendría que afrontar hasta un 1199900% del valor del mechero, que normalmente cuestan cerca de un euro si es recargable.
Las sanciones se acogen a "principios de neutralidad e igualdad" de la ley, por los cuales "no se podrá realizar, en ningún caso, actividad promocional de labores de tabaco destinada a los expendedores y titulares de autorización de punto de venta con recargo, ni utilizar a éstos o aquéllos como vía o instrumento para la entrega de incentivos dirigidos al público".
En algunos casos, las sanciones pueden alcanzar los 120.000 euros, y como medida más extrema perder la licencia. El organismo encargado de regular los estancos cobra el canon concesional, la tasa por prestación de servicios y las multas por infracciones.
Según las cuentas del pasado año, ganó 29,7 millones de euros, con un gasto medio por funcionario de 37.000 euros. Los 56 miembros que conforman la plantilla apenas pueden hacer este tipo de actuaciones, por lo que han pedido el apoyo a Hacienda y la Guardia Civil. En caso de que la medida se llevara al límite, la mayoría de estancos tendrían que cerrar, ya que este regalo es muy extendido en el sector."

 No me extraña que los estancos estén en pie de guerra por la decisión del Ministerio de Hacienda somos todos, es pa mear y no echar gota.