De cómo escribimos una carta que no por insólita dejaba de merecer respuesta, cosa que no aconteció, y de cómo en vista de ello los expedicionarios decidieron ignorar tan incalificable conducta y llevar a buen término lo que en ella se explicaba de la manera más galana y detallada.
París, 9 de mayo de 1982.Señor Director de laSociedad de las Autopistas,41 bis, Avenue Bosquet,75007 PARIS
Señor Director:Hace algún tiempo, su Sociedad me pidió autorización para publicar en una de sus revistas, algunos pasajes de mi cuento titulado La autopista del sur. Por supuesto otorgué con viva satisfacción dicho permiso.Me dirijo ahora a usted para solicitarle a mi vez una autorización de naturaleza muy diferente. Junto con mi esposa Carol Dunlop, igualmente escritora, estudiamos la posibilidad de una «expedición» un tanto alocada y bastante surrealista, que consistiría en recorrer la autopista entre París y Marsella a bordo de nuestro Volkswagen Combi, equipado con todo lo necesario, deteniéndonos en los 65 paraderos de la autopista a razón de dos por día, es decir empleando algo más de un mes para cumplir el trayecto París-Marsella sin salir jamás de la autopista.Aparte de la pequeña aventura que esto representa, tenemos la intención de escribir paralelamente al viaje un libro que contaría en forma literaria, poética y humorística las etapas, acontecimientos y experiencias diversas que sin duda nos ofrecerá tan extraña expedición. Dicho libro se llamará quizá París-Marsella en pequeñas etapas, y está claro que la autopista será su protagonista principal.Tal es nuestro plan, que se llevaría a cabo con el apoyo de algunos amigos encargados de reabastecernos cada diez días (aparte de lo que encontraremos en los paraderos de la autopista). El único problema está en que, según creemos saber, un vehículo no puede permanecer más de dos días en la autopista, y por esa razón nos dirigimos a usted para pedirle la autorización que, llegado el momento, nos evitaría tener dificultades en los diferentes peajes.Si piensa usted que nuestra idea de escribir un libro sobre el tema no resulta desagradable para su Sociedad, y que no hay inconveniente en autorizarnos a «vivir» un mes desplazándonos a razón de dos paraderos por día, me agradaría recibir su respuesta lo antes posible, puesto que quisiéramos partir hacia el 23 de este mes. Queda igualmente entendido que de ninguna manera quisiéramos que nuestro proyecto fuera difundido por la prensa pues, siendo conocidos como escritores, podríamos ver perturbada nuestra soledad de expedicionarios. Llegado el día, nuestro libro se encargaría de contar la historia al público en general.Agradeciéndole por adelantado su buena voluntad con respecto a este proyecto, le ruego acepte, señor Director, mis sentimientos más sinceros, así como los de mi esposa.
                                                                            JULIO CORTÁZAR

Los autonautas de la cosmopista o un viaje atemporal París-Marsella es un libro escrito en coautoría por el escritor argentino Julio Cortázar y su esposa, la fotógrafa canadiense Carol Dunlop, en el que se narra el viaje emprendido a bordo de una Volkswagen Combi roja, denominada Fafner como el dragón de Wagner,1 por la Autopista del Sur, partiendo desde París rumbo a Marsella, durando 33 días.
Antes de realizar el viaje la pareja se impone reglas de juego que deben cumplir en forma obligatoria, como hacer expediciones científicas en cada parada que realizan, lo que contribuye a que haya humor y fantasía. La pareja compara el viaje con los realizados por Cristóbal Colón o Marco Polo, que los transporta a una realidad paralela surrealista y lúdica en la que los viajeros terminan descubriéndose a sí mismos.

De estas reglas científicas provienen los materiales que se incluyen en la obra como fotografías y descripciones de flora y fauna entre otras que según los autores «sin las cuales dicho libro no tendría un aire serio». En el libro se suceden situaciones peligrosas y de misterio como espías, brujas e incluso personajes recurrentes en otras obras de Cortázar como Calac y Polanco, provenientes de 62 Modelo para armar
Si os la quereis bajar aquí os dejo el enlace del pdf.