SÁNCHEZ DIMISIÓN


España es el país europeo con más contagios aunque son más visibles las medidas de prevención. Sin embargo, son estos mismos países -prácticamente todos los de la zona Schengen, y algunos otros más lejanos los que establecen restricciones para viajar a determinadas zonas de España. Y son recomendaciones lógicas, porqué nuestros datos son los peores de Europa. La cuestión de que las autoridades sanitarias no saben responder qué estamos o estan haciendo mal.
Salvador Macip, médico e investigador de la Universidad de Leicester, atribuye los rebrotes a un conjunto de factores de carácter social, económico y político que nos distinguen de nuestros vecinos. "Llevar la máscara por la calle es una buena idea porque contribuye a que los ciudadanos se acostumbren a usarla. Pero es en espacios cerrados llenos de gente donde realmente es eficaz. Si la llevamos al aire libre pero nos la sacamos en situaciones de riesgo, al entrar en domicilios o recintos públicos, estamos realizando un esfuerzo bastante inútil", argumenta.
Nuestras costumbres sociales juegan un papel relevante en la propagación de virus. Las principales fuentes de contagio son las reuniones familiares y de amigos. "Y en España, durante el verano, tendemos a socializar mucho, especialmente los jóvenes, que son los que menos se ponen la máscara", razona Macip, autor del libro 'Las grandes epidemias modernas'.
Pero si en algo coinciden todos los expertos es en no culpabilizar a los ciudadanos de la actual situación. "El confinamiento se hizo muy bien. España controló más rápidamente que otros países la primera ola de la epidemia para que la gente cumplió escrupulosamente las normas", destaca el médico.
El problema fue la gestión posterior. "La desescalada fue precipitada. Por temor de que se hundiera más la economía se quiso reactivar el turismo en seguida para no perder la temporada, lo que produjo más movilidad. Se habló de la nueva normalidad, trasladando un mensaje de relajación que ha sido contraproducente. en una crisis sanitaria de esta magnitud no se puede nadar y guardar la ropa ", opina Macip a la vanguardia. Tampoco hubo prevención. Se sabía que habría un repunte pero se confió en que éste era un virus estacional y que la situación permanecería tranquila hasta el otoño. No había una respuesta preparada para una ola de rebrotes: ni suficientes tests, ni rastreadores ni la posibilidad de confinar la población.
Y es que la organización política del territorio tampoco ayuda. "En el Reino Unido se hizo todo muy mal desde el principio, peor que en España. Pero una vez estabilizada la situación, en Leicester hubo un rebrote que se originó en los talleres textiles, donde las condiciones de los trabajadores son similares a las de algunos temporeros en España. a diferencia de Lleida o Aragón se decretó rápidamente el confinamiento porque había mecanismos políticos para hacerlo. en España no pasa esto ", explica Macip.
De lo que explica Macip, nos encontramos en que donde en principio se gestionó mejor la pandemia y más bien se portó la ciudadanía, es, donde estamos peor, aunque diría que también es donde más se informa y más datos se dan, y todo ello se podría haber evitado, y aunque no lo diga en Salvador ya os lo diré yo. Si desde el primer momento se hubiera dejado el control total de la pandemia en manos de la Generalidad de Cataluña, seguro que ahora estaríamos mucho mejor y ya no tendríamos ni el virus, ellos sí que saben cómo se debe gestionar una pandemia de manera eficaz como se está viendo, pero como el Gobierno de España no les deja trabajar, así estamos. Sánchez dimisión.

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