MUERA LA INTELIGENCIA



Morder sin ton ni son conlleva el riesgo de acabar auto lesionándose. Las diatribas de Casado contra Pedro Sánchez se produjeron el mismo día en que este recibía los elogios de Ursula von der Leyen y Joe Biden dedicados al presidente, lo que desnudó la incapacidad de Casado, también la de su equipo. No sólo se trata del ataque caricaturesco y continuado, de anclarse en la negatividad, incluso a la deslealtad, sino de no saber leer la situación, de desconocer el papel que España está jugando en el tablero mundial. Sus ataques sólo agrandan Sánchez y refuerzan una imagen mezquina y miserable del Pp. Mientras, el lanzador de huesos de aceituna, en el summum del delirio dice que ya tienen formado el Consejo de Ministros para cuando gobiernen, a falta de dos años para las elecciones. Esto si que es optimismo.

La oposición también da la medida de un país. Y sus posibilidades de emprender con éxito los desafíos. El bloqueo del poder judicial por parte del PP es el reflejo de un partido que sigue sin soltar los amarres del inmovilismo El mismo que le lleva a acatar sin presentar recurso una sentencia del TSJM y vuelve a colocar Millán Astray en el callejero madrileño. Muera la inteligencia.

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