MEMORIA DE PEZ DEL PERIODISMO ESPAÑOL

Estos días, algunos medios de comunicación españoles (la minoría todavía) han descubierto que el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, movía las cloacas del Estado sin reparos. De todo lo que se dice ahora, cualquier catalán medianamente informado lo sabíamos desde hace tiempo. ¿Qué está pasando ahora? Vamos a recordar:

El diario digital Público publica en el 2016 la grabación de una charla entre Fernández Díaz y Daniel de Alfonso del 2014 en la que el ministro dice: “El presidente lo sabe”. Toda la conversación en un país con tradición democrática habría generado la dimisión del ministro y del presidente del gobierno. Habría comisiones de investigación y varios fiscales y jueces delimitando responsabilidades.

El ministro fue recusado, pero no dimitió, y Rajoy tampoco. No ocurrió nada. Ahora el tema ha reaparecido y algunos medios como El País parecen haber descubierto el Mediterráneo. Ocho años después. En la comisión de investigación del Congreso, PP, Cs y PSOE impidieron la comparecencia de muchos de los máximos responsables. Que el PP impida investigar tiene su lógica, aunque sea perversa, pero ¿el PSOE también? Porque? Cualquier respuesta es realmente chunga. El PSOE al final voto favorablemente a las conclusiones porque, cómo no, también fue víctima en el tema del 11-M y en el caso Faisan.

Aunque el informe fue duro, no se emitió en la Fiscalía, los grandes partidos no quisieron. ¡Viva la transparencia! Se destacan las cloacas, se investigan en sede parlamentaria, las conclusiones son claras y diáfanas, pero… no se hace nada. El Tribunal Supremo (TS), lleno de miembros de extrema derecha y controlado por detrás por el PP, consideró que no era “relevante” el contenido de las grabaciones. Con un par. Después hemos sabido que se pagaban 2.000 euros mensuales de los fondos reservados del Ministerio del Interior al chófer de Bárcenas para que le espiara. Incluso hay recibos, algo increíble.

Sucedió durante el gobierno Rajoy con Jorge Fernández Díaz como ministro del Interior. García Castellón limita los daños a Fernández Díaz e impide ir más arriba, aunque existen grabaciones que les implican directamente hechas en la sede del PP en la calle de Génova. ¿Quizás porque han dejado solo a Fernández Díaz ahora sabemos un poco más?

Hay pruebas de corrupción y mafias para poner en prisión a la mitad de los dirigentes del PP. El Tribunal Supremo se encarga de que esto no ocurra, por ello no quieren renovar un CGPJ caducado desde hace cinco años. Toda esa caterva son los mismos que se han inventado las pruebas contra el republicanismo independentista catalán.

Ahora, seis años después, el juez de extrema derecha García Castellón afirma sin ruborizarse que hubo terrorismo en el Tsunami Democrático. Lo hace para boicotear los acuerdos de la mayoría de gobierno en España. ¿Nadie juzgará a este juez? No, claro. Está haciendo el trabajo que le encargaron: acusar a indepes y podemitas y archivar los casos de corrupción del PP. Y por eso, también, Grande-Marlaska sigue siendo ministro. - Jordi Serrano Historiador y párroco emérito de la UPEC en el Diario de Sabadell.

2 comentarios:

  1. La memoria de pez del periodismo -no creo que sea olvido sino carencia de intención de recordar- va inculada a la voz de sus amos. Gran parte de la prensa y tv está sufragada por distintas vía por la derecha española desde sus instituciones. Qué puedes esperar.

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  2. Esta es la diferencia entre aquí y Madrid, que nosotros tenemos acceso a toda la información y ellos solo en parte y de parte. Yo puedo informarme en ABC o la Razón, y en Nació digital o Vilaweb, a la vez, y en Madrid no.

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