La ejecución mediante pelotón de fusilamiento puede convertirse en el principal método para las condenas a muerte en el estado de Idaho, EEUU. La ley, aprobada el miércoles en el Senado llegará esta semana a la oficina del gobernador, que tendrá que decidir si la ratifica.
El senador republicano promotor de la legislación justificaba su propuesta ante los intentos fallidos para ejecutar a Thomas Creech, a quien el equipo de ejecución no pudo encontrar una vena adecuada para matar al condenado. La decisión de adoptar el pelotón de fusilamiento como método principal de ejecución surge de la dificultad para obtener las sustancias necesarias para las inyecciones letales. El gobernador Brad Little firmó una ley que establece este método como primario, relegando la inyección letal a una opción secundaria. Según los defensores de esta medida, el pelotón de fusilamiento es considerado más humano y efectivo, especialmente tras intentos fallidos con inyecciones letales en el pasado. Este cambio también refleja un contexto más amplio en Estados Unidos, donde varios estados enfrentan desafíos similares debido a la escasez de medicamentos para la pena capital
Desde el año 1608, al menos 144 presos han sido ejecutados por disparos en EEUU, prácticamente todos en el estado de Utah, según la agencia de noticias AP. Desde 1977 solo se han realizado tres.
Solo un senador republicano votó en contra de la ley. Policía jubilado y veterano del ejército, Daniel Foreman dijo que había visto muertes por disparos “y son todo menos humanas”.
Algunos argumentan que el pelotón de fusilamiento es más rápido y menos propenso a errores que otros métodos, mientras que otros lo consideran un retroceso ético y moral. Es un tema que toca fibras sensibles sobre la justicia, la humanidad y la pena de muerte en general.
La última ejecución por pelotón de fusilamiento en Estados Unidos ocurrió en 2010 en Utah. Sin embargo, este método de ejecución está programado para ser utilizado nuevamente mañana 7 de marzo de 2025 en Carolina del Sur. Brad Sigmon, condenado por asesinato, ha optado por este método en lugar de la inyección letal o la silla eléctrica, debido a preocupaciones sobre el sufrimiento asociado con estos métodos
Kavafis debe estar retorciéndose en su tumba, los bárbaros ya han llegado, y en vez de tratar de eliminar la pena de muerte que sería lo razonable y civilizado, rescatan el pelotón de fusilamiento. Bárbaros, y encima no saben que el pelotón de fusilamiento tampoco es eficiente en un cien por cien, Gila se salvó de uno.
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