Y no andaba desencaminado.
La Crisis hasta ahora no ha sido aún del todo una crisis, o dicho de otra manera se ha podido más o menos capear con el cobro del paro por muchos que se han quedado sin trabajo, la ayuda del tejido social muy arraigado en nuestra país y también por la economía sumergida. Pero lo preocupante es que el Gobierno del Estado en vez de afrontarla y de buscar soluciones a medio y largo plazo para reinventar la economía del País dado que el modelo productivo en que nos hemos basado hasta ahora está agotado, se ha limitado ha aplicar medidas populistas de corto vuelo como el 400 € o el famoso e inútil plan E, u otros parches en esta línea populista, sin concienciar a los ciudadanos que lo peor de la crisis aún está por llegar, y que así como el resto de países de la Comunidad Europea empiezan a ver como se dice ahora algunos brotes verdes, aquí seguimos instalados en el yermo sin posibilidad de recuperación posible a medio o largo plazo, aunque sea por seguir la inercia del resto.
El problema de España es mucho más profundo, ya estamos perdiendo las industrias que como una gota malaya van cerrando o trasladándose a otros países, se ha dejado abandonada a su suerte a la pequeña y mediana empresa en su desdicha, el ladrillo necesitará cinco o más años para recuperarse y el turismo irá cada vez a menos, absorbido por nuevos lugares con mejor oferta que la nuestra. Y no será que no hay gente que tiene las ideas claras de lo que debería hacerse, pero el Gobierno autista no se entera o no quiere enterarse dado algunas de las medidas que deberían poner en marcha ya no son de foto en los periódicos ni fáciles réditos electorales. Aqui priva sólo el gesto, la noticia impactante de una medida que posiblemente no servirá para nada o que ni siquiera se aplicará, pero ya se ha dicho y se ha conseguido el titular que es la máxima aspiración que tienen nuestros gobernantes.
Y es que el problema es muy de fondo y viene de lejos, de hecho de la misma manera que la dictadura comunista produjo generaciones de trabajadores improductivos que malvivían sin mucho esfuerzo, aquí en otra medida sucedió lo mismo bajo el franquismo, sino , ¿porque la productividad española está a día de hoy a niveles del 1975?, y la huida de empresas qual gota malaya es constante mientras que aguantan aquí es a base de ayudas multimillonarias del Estado a fondo perdido y a largo plazo inútil.
Aqui se ha estirado más el brazo que la manga y todo el mundo se ha apuntado al dinero rápido y fácil, sin poner unas bases empresariales a medio y largo plazo. Nos hemos comportado como si fuéramos ricos yendo al trabajo en coches de mayor cilindrada y prestaciones que el del jefe en muchos casos, otro coche para la mujer, vacaciones en Thailandia o en el Caribe, segundas residencias, etc etc, y no nos lo podíamos permitir, pero lo hemos hecho (¡ay si el Banco Cetelem y otros hablaran!).
Ahora, con un Gobierno que ha hecho unos presupuestos utópicos, donde por cierto se ve que han decidido recortar un 16% la partida destinada a investigación y desarrollo, lo que demuestra su ineficiencia y nula visión de la realidad, todo el mundo está alucinado y empieza a tener clara conciencia de lo que nos viene encima. Un Gobierno muerto y enterrado y uno que viene que no ofrece garantías de poder solucionar nada.
A todo esto, Bancos y Cajas generosamente dotados por la administración para medio tapar sus vergüenzas desconfían unos de otros y se fusionan para evitar el cataclismo, todo esto para salvarse ellos y sus muebles, mientras el resto vemos asombrados como se nos hunde el edificio en fallar los cimientos.
Y es por eso, porque los fundamentos de la economía productiva de esta sociedad se han derrumbado que la solución radica en buscar nuevas maneras, haciendo mucha pedagogía que a menudo puede resultar impopular de cara a unas elecciones, en el sentido de que debemos cambiar en nuestra manera de vivir y adaptarnos sin renunciar a nada fundamental a una austeridad de la que no debíamos haber salido. La única propiedad que tengo es mi cuerpo, el resto es casi todo prescindible, que siendo esta una toma de posición realista es también útil dado evita frustraciones innecesarias y delirios de grandeza a menudo de nuevo rico "piojo resucitado decimos en catalàn" que es lo que hemos sido y como nos hemos comportado estos últimos años. Somos peor que los pobres, un pobre no tiene nada pero tampoco debe nada, nosotros somos pobres, debemos dinero y encima en el mejor de los casos tenemos que seguir trabajando para seguir siendo pobres, esta es la dura realidad.
Hasta ahora hemos tenido una crisis asumible como otras que hemos pasado y a trompicones nos hemos salido tirando del mismo sistema, pero ahora empieza una nueva crisis de unas dimensiones desconocidas para nosotros para la que no estamos preparados y las recetas económicas antiguas ya no valen. Bienvenidos a la crisis ... acaba de empezar!
0 Comentarios:
Publicar un comentario