Dicen los medios, que el macro funeral de la Señora Thatcher ha costado doce millones de euros, de los cuales la mitad la pagarán los contribuyentes. Funeral, celebrado ayer con toda la pompa y circunstancia de quien se había hecho acreedora de un acto más modesto y que no debería haber costado ni un céntimo a los ciudadanos de su país que tanto la sufrieron.
Habría que recordar que la señora Thatcher durante su mandato desmontó las estructuras del Estado, desmanteló la industria minera, subió una barbaridad las matrículas universitarias y se cargó a los sindicatos. Recordar también que fue amiga de Augusto Pinotxet mientras tildaba a Mandela de terrorista. Debe ser como decía ayer el Gran Wyoming que quizás estamos mandados por imbèciles que no tienen ni puta idea de nada y que nadie osa decirlo.
La Señora Thatcher hablaba como Rajoy ayer, de aplicar la medicina a la economía, y sus enfermos todavía se acuerdan de ella, vistos los resultados de la aplicación de sus medidas, quizá por eso, en los campos de fútbol ingleses no se celebró el 'minuto de silencio' por su muerte, debe ser que se temían un silbido masivp por parte de los aficionados, la gran mayoría perjudicados por su gestión al frente del Gobierno.
En España este trabajo de desmontar las estructuras del Estado ya la llevó a cabo primero el Sr. Aznar, la continuó Zapatero y lo ha rematado Rajoy mientras la minería hace años que agoniza y los sindicatos se han auto inmolado solos.
Habría pues empezar a ahorrar para cuando falte cualquiera de los tres líderes mencionados para organizarles una despedida a la altura o lo más parecido al de la Sra. Thatcher, sería de recibo hacerlo.