Estaba anoche contestando un comentario a Temujin, cuando de repente en la tele me invade impunemente la cara abotargada del Bourbon (que ese es su apellido real) vomitando el discurso anual en el que supongo dijo las mismas vaguedades de cada año, leídas al telepronter, que él es incapaz de escribir un discurso de más de 30 segundos. El discurso ya sabemos que es grabado, seguramente deben tardar tres o cuatro días hasta que el señorito es capaz de leerlo seguido sin equivocarse demasiado con su voz vacilante. El Bourbon, anoche en la Zarzuela tenía a cenar al yerno Iñaki y la hija, o sea de chorizo a chorizo y tiro porque me toca, y nadie le hace ascos a esta noticia ni se rasga las vestiduras.
Tampoco entiendo que esta mañana algunos diarios intentaran sacar el jugo y el brezo al discurso vacío y monótonamente uniforme del Bourbon, cuando es un discurso (que ni TV3 ni ETB emitieron) que no merece ningún comentario, y si en cambio lo merece y crítico, la presencia del yerno chorizo en la cena de Nochebuena en la Zarzuela.
Y es que todo esto de la Monarquía es como una opereta o quizás una ópera bufa. Una tontería que nos cuesta 8 mil millones de euros directos más todos los costes indirectos al año - poca broma -. Sólo la seguridad en Suiza de la Infanta cuesta 480.000 euros anuales, que no sé si es para vigilarla a ella o a su marido para que no haga más estragos en el país de las vacas de color lila y el queso.
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