Al delirio de una persona se le dice locura, al delirio de muchas personas se le dice religión, pero como ya expliqué en su día hay una nueva y definitiva religión, el pastafarismo, la religión del espagueti volador. A través de internet se organizaron para redactar su propio Evangelio, y trazaron todos los detalles de un culto que gira en torno al Monstruo del Espagueti Volador. Ahora los pastafaris cuentan con su primera iglesia física en Alemania, un lugar donde los fieles de esta irónica religión dan rienda suelta a su creatividad y practican su fe: nada como una buena cerveza y unas cuantas canciones.. 


En el pueblo alemán de Templin, en el norte del país, un cartel señala el camino que lleva hasta la Iglesia del Monstruo del Espagueti Volador ('Kirche diciembre Fliegenden Spaghettimonsters'). Google Maps también lo indica. Se trata del primer y único templo pastafaris del mundo, un lugar donde los fieles se congregan para rendir culto a su adorado Monesvol. Sus oficios, una especie de las misas para los cristianos, se celebran los viernes. El equivalente al sacerdote, encargado de guiar la oración, es el 'noodles' (tallarinador? Tallarinero?). No hace falta formación específica ni hay jerarquía: podria ser cualquiera.