Su cara de felicidad, su sonrisa al llegar a la meta, expresa más que todas las palabras. Bailey Matthews, un niño de 8 años con parálisis cerebral, es un auténtico campeón. Hace unos días logró terminar un triatlón celebrado en la localidad de North Yorkshire, en Inglaterra, tras recorrer una distancia que no cualquiera es capaz de completar: nadar 100 metros, hizo 4 kilómetros en bicicleta y terminar con una carrera de 1.300 metros .

Esta proeza es sólo un hito más en la vida de Bailey, acostumbrado a superar obstáculo tras obstáculo. Nació 9 semanas prematuro y tuvo que aprender a caminar cuatro veces. Ahora le es prácticamente imposible caminar sin ayuda de un andador. Esto no impidió que el niño se mostrara convencido de participar en el triatlón. Así que sus padres se pusieron manos a la obra y le ayudaron a entrenarse. Terminó la carrera sin ninguna ayuda y sólo con la compañía de su padre durante todo el recorrido.


El premio de llegar fue el recibimiento que le dieron las cientos de personas que la esperaban a la meta. La alegría llevó a dejar de lado el andador y levantándose por sí mismo tras caer varias veces. Te quiero Bailey y te admiro, por tu coraje, con él das sentido a la vida, a la tuya y a la nuestra.