Felipe González ha asegurado este miércoles que Pedro Sánchez, en contra de lo que ha defendido en público desde las últimas generales, le confió que pensaba abstenerse en la investidura de Mariano Rajoy para permitir que gobernara el PP e impedir así unas terceras elecciones. "El 29 de junio me explicó que pasaba a la oposición, que no intentaría ningún gobierno alternativo, que en la primera votación de la investidura de Rajoy votaría en contra y que en segunda abstendría por no impedir la formación de gobierno. Me llamó porque quiso. Y claro, me siento frustrado, como si me hubieran engañado. Me dice 'pienso hacer esta cosa' y luego hace algo completamente diferente. Yo no he vuelto a sentarme a hablar con él. He intercambiado con él un par de mensajes. No sé si ha hablado con otros dirigentes. Si ha cambiado de posición, no lo ha contado a nadie. Debe tener sus razones, pero yo no las entiendo", señaló el ex presidente del Gobierno en una entrevista en la Cadena Ser.
De memoria olvidadiza por cierto Felipe:  Me dice 'pienso hacer esta cosa' y luego hace algo completamente diferente. OTAN de entrada no, o si o alomojó....

Felipe González miente, y lo hace conscientemente, obviamente no lo sé, pero lo intuyo, la mentira de Felipe, forma parte de los ataques que recibirá Sánchez de hoy al sábado, que serán feroces, como dice Antón Losada: Para estar acorralado y medio muerto¡ resulta impresionante la cantidad de munición que se está malgastando en rematar a Pedro Sánchez. La balasera resulta realmente atronadora. La variedad y potencia destructiva de la munición empleada parece digno de una película de Marvel.

Nadie dedica tanto tiempo y esfuerzo a matar a un cadáver. Así que este muerto debe estar muy vivo y más debe haber muchas ganas de rematarlo. Pedro Sánchez parece haberse convertido en el único obstáculo que, a día de hoy, impide la investidura de Mariano Rajoy y el inicio de una legislatura dominada por la mayoría conservadora que suman el PP y Ciudadanos.

Se acusa Pedro Sánchez de embarcarse en esto por pura supervivencia política y como maniobra para conservar el poder dentro del PSOE. Una acusación que sería relevante si todos los demás estuvieran maniobrando para conseguir la paz en el mundo y la felicidad de todos los españoles. También se le imputa el cargo de mezclar de manera irresponsable los problemas orgánicos socialistas y los problemas de gobernabilidad. En todo caso podrá acusar de haberlos agitado porque ya llevan nueve meses mezclados. O es que las líneas rojas que se le impusieron en diciembre para dificultar todo lo posible sumar una mayoría de cambio no tenían nada que ver con la lucha interna por el poder socialista?

Lo pueden acusar de haber matar a Kennedy, y si es necesario lo harán, pero por un momento, sólo por un momento, imagínense que se hubiera abstenido para que el Plasma pudiera gobernar y la misma noche le colocan a Soria en el Banco Mundial. La desmedida ambición de la rama andaluza tiene mucho que ver en todo este asunto, pero si se cargan a Pedro Sánchez, de rebote se habrán cargado lo que queda del PSOE, y sino al tiempo.