HOMBRÍA DE BIEN
Sea por vanidad o por puro instinto de supervivencia, la gente nos mostramos no como realmente somos sino como pretendemos ser, o como queremos vanamente que nos vean los demás, evitando mostrarnos como realmente somos, y posiblemente sea mejor así, la decepción podría ser aún mayor, aunque rara vez el disfraz funciona y solemos acabar retratados. Esta teatralización se da mucho más en los hombres que en las mujeres. Fijaos en que hombría de bien es una palabra que no tiene declinación femenina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario