La situación que os voy a contar, es una paradoja, en la que se explica cómo en esta pirámide que es la economía, es importante no se rompa ningún eslabón de la cadena. La paradoja tiene su tiempo pero con otros nombres y ubicación la explica en su último libro el Filósofo J.Antonio Marina.
- Te debo el pastel y las pastas del otro día. ¿Verdad?
- Sí, son cien euros.
Y el propietario le paga, de modo que el panadero se va del Hostal con los cien euros que Juan Colom, ha dado al propietario del hotel.
Sale el panadero y antes de llegar a la panadería se encuentra al lampista.
Cuando pasarás a cambiarme el motor de la cámara? Cualquier día de estos se estropeará y tendremos un problema gordo. Toma, añade el panadero, 100 euros por si te hacen falta.
Y se van el lampista y el panadero cada uno hacia su casa.
Por el camino, el lampista se encuentra la mujer del propietario del Hostal.
- Hola Maria? Ahora que te veo, toma, dale estos 100 euros a tu marido, que el otro día me los dio para que le comprara una TDT y después me dijo que ya tenía una que le había traido no se quién.
En estas que al rato, se presenta Joan Colom, el viajante. Hola, buenas noches, escúcheme que no me quedo a dormir, me ha llamado un amigo y nos vamos a cenar y a dormir a Girona, ah! por cierto, que me ha dicho este amigo que el billete de 100 euros que me dio ayer y yo le he dejado a usted de paga y señal, es falso, que ha sido por error que me lo dio, menos mal ....
Y así es como en devolverle el Hostalero el billete de 100 euros al comercial, resulta que con un billete falso, cobra el panadero, el lampista y la hostelera y además vuelve este billete al comercial que lo devolverá a su amigo que lo guardará ¡o no! porque es falso.
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Moraleja: para que vaya bien la economía es importante pagar las deudas para no romper el eslabón de la cadena.
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