LA ISLA DE LOS INMIGRANTES

El gobierno de Dinamarca quiere crear un centro en una isla deshabitada para enviar los inmigrantes pendientes de expulsión, una medida incluida en un paquete de medidas para endurecer la política migratoria. Según informó El Periódico, el plan, que se incluye en los presupuestos acordados entre el gobierno y el partido xenófobo Partido Popular Danés, afecta a aquellos demandantes de asilo a los que se les ha rechazado por haber cometido delitos graves y criminales extranjeros que no pueden ser devueltos a su país. Lo cual es como mínimo discutible conociendo a los países de donde proceden estos inmigrantes, como podria ser España, Puigdemont y otros podrían entrar en esta calificación sin ir más lejos. (lo cual no digo que me parezca ni bien ni mal), ahí lo dejo.
El centro estará situado en Lindholm, una isla en el sureste del país, destinada des hace un siglo a experimentos con enfermedades contagiosas para animales y hasta julio bajo el control del Instituto de Veterinaria de la Universidad de Lyngby, en Copenhague. La isla estará controlada por autoridades penitenciarias y los internos podrán abandonarla durante el día pero deberán volver de noche.
La iniciativa ha provocado un aluvión de críticas de entidades pro derechos humanos. Consideran que se encuentra en el límite de la legalidad porque se trata de personas que han cumplido una pena y en las que no se puede privar de libertad.
Este caso es un claro ejemplo de lo pernicioso que puede llegar a ser un partido de ultraderecha como VOX, y como decía ayer refiriéndome a la isla de Creta, somos los ciudadanos los que debemos actuar, es éste un extremo al que no debemos llegar, si es que aún nos queda una mínimo de decencia y vergüenza, y la única solución es tener el suficiente juicio a la hora de votar para que estos partidos rencorosos que viven de predicar el odio es queden donde estaban , dentro la nada. Es bien cierto que más vale votar malo conocido que bueno por conocer.