Laa noticia la publiquér el 29 de Novbre pasado, Una pequeña iglesia protestante de la Haya, en Holanda, ofrecía desde hacía un mes servicios religiosos de forma ininterrumpida, las 24 horas del día, para evitar la deportación de una familia de refugiados armenios.
Según la ley holandesa, la policía no tiene permitido acceder a lugares de culto durante los servicios religiosos. Por ello, más de 300 pastores de todo el país se han ofrecido voluntarios para hacer turnos durante el último mes para celebrar servicios religiosos en la Iglesia Bethel y así evitar que los funcionarios arresten a la familia Tamrazyan, que vive en los Países Bajos desde hace nueve años, según informaba Actualidad Evangélica y medios holandeses.
Según la ley holandesa, la policía no tiene permitido acceder a lugares de culto durante los servicios religiosos. Por ello, más de 300 pastores de todo el país se han ofrecido voluntarios para hacer turnos durante el último mes para celebrar servicios religiosos en la Iglesia Bethel y así evitar que los funcionarios arresten a la familia Tamrazyan, que vive en los Países Bajos desde hace nueve años, según informaba Actualidad Evangélica y medios holandeses.
Pués bien, la iglesia protestante Bethel de la Haia ha puesto punto final a 96 días de misa ininterrumpida. La celebración religiosa comenzó el 26 de octubre para evitar la deportación de Sasun y Anousche Tamrazyan y sus tres hijos. La familia, de origen armenio, llegó a los Países Bajos en 2009, donde pidió asilo. En septiembre de 2018 supieron que el Estado tenía la intención de deportarlos y, tras pedir ayuda a través de las redes sociales, la iglesia protestante de la Haya decidió acogerlos.
Axel Wicke se comprometió a rezar "las 24 horas del día" mientras el caso de la familia no estuviera resuelto, basándose en la ley que impide a la policía irrumpió en una iglesia durante los oficios religiosos. Esto ha llevado a varios curas voluntarios a hacer una "carrera de relevos religiosa" para mantener el reto en marcha.
Wicke puso fin al servicio publicando una fotografía en las redes en el que explicaba que la iglesia volvía a su actividad habitual: Theo Hettema, presidente del Consejo de la Iglesia Protestante de la Haya, también se ha mostrado satisfecho con la iniciativa y ha explicado que "se ha conseguido el resultado deseado": "el propósito de convertir la iglesia en un refugio era brindar seguridad a la familia, que había agotado todos los recursos legales, y llegar a una solución para las familias en situaciones similares. "
El gobierno holandés ha presentado un acuerdo de coalición en el Parlamento que permitirá a los Servicios de Inmigración reconsiderar las órdenes de expulsión que piensan sobre unos 700 niños solicitantes de asilo, arraigados en Holanda con sus familias desde hace más de cinco años.
No es frecuente que una noticia tenga continuidad por parte de la prensa en resolverse en este caso favorablemente y al cabo de 96 días, pero los de la corporación catalana de medios audiovisuales han estado atentos y han publicado la noticia.
Axel Wicke se comprometió a rezar "las 24 horas del día" mientras el caso de la familia no estuviera resuelto, basándose en la ley que impide a la policía irrumpió en una iglesia durante los oficios religiosos. Esto ha llevado a varios curas voluntarios a hacer una "carrera de relevos religiosa" para mantener el reto en marcha.
Wicke puso fin al servicio publicando una fotografía en las redes en el que explicaba que la iglesia volvía a su actividad habitual: Theo Hettema, presidente del Consejo de la Iglesia Protestante de la Haya, también se ha mostrado satisfecho con la iniciativa y ha explicado que "se ha conseguido el resultado deseado": "el propósito de convertir la iglesia en un refugio era brindar seguridad a la familia, que había agotado todos los recursos legales, y llegar a una solución para las familias en situaciones similares. "
El gobierno holandés ha presentado un acuerdo de coalición en el Parlamento que permitirá a los Servicios de Inmigración reconsiderar las órdenes de expulsión que piensan sobre unos 700 niños solicitantes de asilo, arraigados en Holanda con sus familias desde hace más de cinco años.
No es frecuente que una noticia tenga continuidad por parte de la prensa en resolverse en este caso favorablemente y al cabo de 96 días, pero los de la corporación catalana de medios audiovisuales han estado atentos y han publicado la noticia.
0 Comentarios:
Publicar un comentario