Decía el presidente Tarradellas que en política se podía hacer todo menos el ridículo. No es que Tarradellas pudiera servir de ejemplo de nada, pero en esta afirmación tenía mucha razón. El Presidente Torra ha hecho el ridículo varias veces, de hecho, su caso es de un ridículo permanente.
Torra se reunió ayer por la tarde con su núcleo duro para analizar el informe del Síndic de Greuges, cuyo contenido ya conocía desde el viernes. La pancarta a favor de la libertad de los presos políticos todavía colgaba a primera hora de esta mañana de la fachada de Palau.
Una de las opciones de la Junta Electoral es ordenar a los Mossos que retiren la simbología, pero el Gobierno quiere evitarlo.
"Los lazos amarillos, en Cataluña y en el mundo, son un símbolo de recuerdo y reconocimiento con aquellas personas injustamente alejadas de su sociedad", señala el President en el comunicado. Torra, en parte, reitera su "convencimiento" de que la simbología de este color "no es partidista", y "reafirma" su "compromiso" con la libertad de expresión en el espacio público. "No debe ser neutral, sino libre", recalca.
Muy bien, President, pero si la Junta electoral dice que se deben retirar los lazos amarillos, aunque las elecciones sean Españolas, y que sea justa o injusta su decisión, o se aguanta el tipo y se dejan los lazos o se sacan enseguida sin montar numeritos de sainete, como ayer que aún sostenía que no les sacaría a la sesión del Parlamento, y Arrimadas (mal me está el decirlo) ya le dijo que si lo haría, haciendo una vez más el ridículo. Y, ya puestos, Señor Torra, ahora no haga inventos con pancartas y símbolos alternativos que no llevarán a ninguna parte más allá de su infantilismo. O deja los lazos colgando asumiendo las consecuencias o sáquelos y punto. Piense que si le inhabilitaran, la multa impuesta ya sabemos que la acabaremos pagando nosotros y el hecho de que usted estuviera inhabilitado, tampoco se notaría mucho por no decir nada, para lo poco que hace...
Torra se reunió ayer por la tarde con su núcleo duro para analizar el informe del Síndic de Greuges, cuyo contenido ya conocía desde el viernes. La pancarta a favor de la libertad de los presos políticos todavía colgaba a primera hora de esta mañana de la fachada de Palau.
Una de las opciones de la Junta Electoral es ordenar a los Mossos que retiren la simbología, pero el Gobierno quiere evitarlo.
"Los lazos amarillos, en Cataluña y en el mundo, son un símbolo de recuerdo y reconocimiento con aquellas personas injustamente alejadas de su sociedad", señala el President en el comunicado. Torra, en parte, reitera su "convencimiento" de que la simbología de este color "no es partidista", y "reafirma" su "compromiso" con la libertad de expresión en el espacio público. "No debe ser neutral, sino libre", recalca.
Muy bien, President, pero si la Junta electoral dice que se deben retirar los lazos amarillos, aunque las elecciones sean Españolas, y que sea justa o injusta su decisión, o se aguanta el tipo y se dejan los lazos o se sacan enseguida sin montar numeritos de sainete, como ayer que aún sostenía que no les sacaría a la sesión del Parlamento, y Arrimadas (mal me está el decirlo) ya le dijo que si lo haría, haciendo una vez más el ridículo. Y, ya puestos, Señor Torra, ahora no haga inventos con pancartas y símbolos alternativos que no llevarán a ninguna parte más allá de su infantilismo. O deja los lazos colgando asumiendo las consecuencias o sáquelos y punto. Piense que si le inhabilitaran, la multa impuesta ya sabemos que la acabaremos pagando nosotros y el hecho de que usted estuviera inhabilitado, tampoco se notaría mucho por no decir nada, para lo poco que hace...
11:51 am - Don erre que erre ha colgado una nueva pancarta cambiando el color del lazo amarillo por otro blanco, hasta que la Junta electoral central la vuelva a prohibir y la sustituya por otra..., Lo que decía, actuaciones infantiles; si es que son como niños, lástima que no les podamos pegar una buena colleja. Les iría bien.
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