Cada vez hay más patinetes eléctricos circulando por las calles de Barcelona. La ciudad dispone de una ordenanza que establece por ejemplo por donde pueden circular y desde hace tiempo la Guardia Urbana multa a los usuarios que la incumplen. El teniente de alcalde de Prevención y Seguridad, Albert Batlle, quiere ir más allá y es partidario de ser más restrictivo y que estos dispositivos estén matriculados y tengan un seguro. Batlle lo ha dicho en una entrevista a RAC1.
Aunque el Ayuntamiento de Barcelona cuenta con una ordenanza municipal que regula el uso de los vehículos de movilidad personal (VMP), dentro de los cuales están los patinetes, y actualmente trabaja en una norma que afecte a las empresas que los ofrecen de forma compartida, el gobierno de la ciudad mantiene que hasta que no haya una legislación estatal no podrá abordar por completo su uso.
A la espera de la normativa estatal, el teniente de alcalde de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, ​​Albert Batlle, considera que estos vehículos deberían ir matriculados y estar asegurados. También es partidario de que haya "unas limitaciones de los espacios que pueden ocupar" y tener en cuenta la edad de uso.
De hecho, Batlle empleó la palabra 'andrómines' (trastos) en referencia a patinetes, segways y otros. Lo que no entiendo es porque los patinetes deben lucir matrícula y tener un seguro, y bicicletas y patinadores no. Antes, las bicicletas llevaban una matrícula que se iba a buscar al ayuntamiento, creo recordar que valía 5 pesetas al año, por lo tanto no ha inventado nada nuevo el Sr. Batlle, a menos que tenga una cierta fobia a los patinetes para discriminarlos de la manera burda en que lo hace. Es lo de siempre, en vez de criminalizar y de erradicar de la ciudad al auténtico y grave problema que son los coches, se pone con el más débil que es el patinete, un patinete que superada la aversión inicial que me produjo, osaría afirmar que es el medio ideal, después de caminar, para moverse por la ciudad, regulando eso si su uso, como se hace en cualquier otro medio de transporte urbano.
En el fondo, el problema del patinete, como el de las bicicletas y otros medios de transporte urbano, es el civismo, o mejor dicho el incivismo de los usuarios de estos trastos que dice el Sr. Batlle, y esto no se arregla con matrículas ni seguros. Un incivismo aplicable a muchos, a demasiados peatones.