PROHIBIDO PROHIBIR

Una de las consignas más celebradas del Mayo del 68, és aquella de 'Prohibido prohibir', lo que no deja de ser una contradición per se, aunque también habia otra consigna muy poética: "debajo de los adoquines está la playa", hasta que descubrieron que lo que habia debajo de los adoquines eran las cloacas del Estado.

El cierre de establecimientos de ocio decretado por la Generalitat ayer a última hora por el problema de los rebrotes, no conseguirá cambiar el comportamiento de los jóvenes y  adolescentes, prohibir alguna actividad se ha repetido numerosas veces a lo largo de la historia y ha demostrado no ser muy útil. Prohibir significa invisibilizar una realidad y pretender así que no existe, y si bien es cierto que cerrar los locales de ocio nocturno puede reducir en cierta medida la ocurrencia de eventos masivos, de rebote provocará que estos ocurran de forma más invisible y clandestina via botellón o reuniones privadas. Ya puestos, podrían  prohibir los encuentros en espacios abiertos y así ir prohibiendo sucesivamente pero siempre habrá una manera de encontrar ese ocio, ese encuentro y esa diversión. Está en la naturaleza humana. Así pues, ¿no sería mejor continuar con un ocio nocturno más organizado, con más medidas de seguridad, acompañado de campañas específicas de sensibilización y de responsabilización que vayan directamente dirigidas a las personas que hacen uso de estos espacios? Es cierto que existirán riesgos, pero pueden ser conocidos y controlados, por la cuenta que les tiene, las empresas de ocio aplicaran las medidas que sean necesarias para garantizar el cumplimiento de las mismas.

Lo comentaba ayer, últimamente escuchamos por activa y por pasiva a la administración insistir que entre el colectivo de personas jóvenes es donde se están produciendo los mayores rebrotes. No es del todo cierto. Ha habido rebrotes en reencuentros familiares de todas las edades, también en el ocio nocturno, pero no solamente de jóvenes, en establecimientos como bares y restaurantes, etcétera. Así pues, ¿por qué en lugar de infantilizar a las personas jóvenes tildándolos de irresponsables no buscamos la manera de entender cuál es su visión del mundo en este momento de su vida y promover su responsabilidad ante la pandemia?. Si se explican bien las cosas, la gente lo entiende y más los jóvenes actuales que están mucho más preparados que generaciones anteriores, aunque quizás este ha sido el principal problema en la gestión de la crisis por parte de la Generalitat, su deficiente gestión de la comunicación, que lo único que ha conseguido és confundir a la gente que ha llegado a un punto en que no sabe a que atenerse.