El Museo de la Empatía. es un museo internacional itinerante que fundó Roman Krznaric. Empezó en Londres, pero ha viajado por todo el mundo, y una de sus exposiciones se llama ‘Una milla en mis zapatos’. Es la primera zapatería de la empatía del mundo. Tú entras y es como una zapatería de verdad. Y allí hay zapatos de verdad, que te calzas, mientras escuchas la historia de una persona que te la cuenta. Ella misma te habla de su vida en sus propias palabras y lo escuchas por auriculares. Es una especie de inmersión teatral. ‘Una milla en mis zapatos’ es una exposición que ha estado por muchos sitios del mundo: en Brasil, en Siberia, en los Países Bajos. En España todavía no, desafortunadamente. Espero que llegue algún día. Pero, se trata al final de intentar ver el mundo desde el punto de vista de otras personas.

Una exhibición interactiva está instalada en una calle de Denver como parte de una bienal dedicada a la empatía combina arte, historias y humanismo para que los participantes puedan literalmente caminar en los zapatos de otras personas. El proyecto “Una milla en mis zapatos” forma parte de la Bienal de las Américas y es el resultado de la colaboración entre la artista inglesa Clare Patey y el filósofo Roman Krznaric, nacido en Australia y educado en Inglaterra.

“Cuando pensamos en cuál era la mejor forma de conectar a las Américas pensamos en la empatía, porque ese es el elemento faltante en nuestras relaciones”, dijo a Efe Erin Trapp, socióloga y directora ejecutiva de la Bienal de las Américas en Denver.

“La empatía es como un músculo: puede ejercitarse y fortalecerse. Y cuando lo hacemos, dejamos de enfocarnos en las divisiones”, agregó.

La propuesta en sí es sencilla y engañosamente simple: los participantes se ponen el calzado real que alguien más usó y luego caminan por las calles de Denver a la vez que escuchan en primera persona una grabación de la historia del dueño o la dueña de esos zapatos. Personal y voluntarios de la Bienal acompañan a los participantes. La exhibición, creada hace cuatro años, ya se había presentado antes en Europa, Rusia, Australia y Brasil.