Uno duda de casi todo, y creo que hace bien, porque todo es relativo y depende de la sensación personal. Digo esto porque dicen que ese bochorno que nos invade nos está reportando noches de insomnio, que es imposible dormir con más de 20 grados, que si noches tropicales, que si patatin que si patatan.

Debo de ser raro; ayer a las 10 me fui a dormir, acabado de duchar, eso si, el reloj marcaba 27.3 grados, abrí la ventana y subí la persiana, no sea que la titular me metiera la bronca cuando viniera a dormir. Esta mañana al levantarnos a las 6 me ha preguntado: ¿has tenido calor? anoche tuve que abrir la puerta del comedor para que pasara corriendo de aire. Respuesta de manual: No lo sé, me dormí enseguida y lo he hecho de un tirón hasta ahora, que creo que hace fresquito con tanta corriente de aire. 

Lo sé, no debo ser normal, aunque cierto es que en invierno las paso canutas con el frío. El sábado y el domingo sigo saliendo con la bicicleta, eso si, salgo más temprano, a las 7 y hasta las 9, y ni tan siquiera sudo, claro que a mí me cuesta mucho sudar, siempre tengo las manos frías. A ver si voy a ser reptiliano y no lo sé. De hecho, esto de dormir como un lirón, debe de ser genético. Mi madre me explicaba que de niño tenía que hacer una obra de teatro en la que estaba dentro de una cuna y en un momento determinado de la obra debía levantarme y cantar: Soy el dormilón de Roque... Pero no me levanté, ni canté, porque me quedé dormido.