Un hombre de 54 años se ha suicidado en Paiporta, lanzándose al vacío por el balcón de un cuarto piso, justo el día que iban a desahuciarlo, según han adelantado los informativos de À Punt. El trágico suceso se ha producido en la calle de Albal de la población de l'Horta Sur. En el momento del suicidio estaba presente la comitiva judicial, efectivos de bomberos y agentes de la Policía Local. Un equipo del SAMU ha intentado reanimar el hombre sin éxito. Ángel Máñez, un conocido de la víctima, ha contado a los micrófonos de À Punt que no era la primera vez que trataban de desahuciar la víctima: "Lo querían echar, ya en muchas ocasiones. Y ya lo había anunciado muchas vueltas, que antes de que lo echaron de casa, él haría el que fuera. No trabajaba, cobraba una pensión de muy poco dinero, 300 euros. No podía pagar". El fallecido tenía órdenes de desahucio desde hace años y recibía asistencia económica y psicológica de los servicios sociales del Ayuntamiento, así como del centro de salud, al presentar graves problemas de salud.
El hombre de 54 años no era un okupa, pero ha sido desahuciado con más facilidad que si lo fuera. Parece que los Bancos, que son los propietarios que tienen más viviendas ocupadas de las que por cierto no pagan ningún impuesto ni los gastos de la comunidad, tienen más fácil desahuciar a un propietario que no puede pagar la hipoteca que a los okupas.
Un hombre de 54 años se ha suicidado en Paiporta, lanzándose al vacío por el balcón de un cuarto piso, justo el día que iban a desahuciarlo, y esta es una muerte que se podía haber evitado.
La campaña de las municipales ha reactivado el tema de las ocupaciones, cuando debería de ser un ámbito para debatir ideas, no para generar trifulcas callejeras, pero la miseria moral de nuestros politicuchos ha hecho que se embancaran en el debate a ver quien recogía más frutos del asunto. Es el día de los miserables de cada pre campaña electoral. Habría que refrescarles la memoria, y recordar respecto a la okupación de viviendas ajenas es que es una práctica que vulnera los derechos de la propiedad, aunque muy extendida: en Catalunya se dieron 7.168 casos en el 2021, el 42% de los registrados en toda España. Cierto es que en la mayoría de ocasiones viene a dar respuesta a las carencias habitacionales de determinados colectivos. Lo tercero, que es una cuestión seria y no debe emplearse como arma arrojadiza en vísperas electorales. Los ánimos ya están demasiado encendidos. En días recientes hemos asistido a un inquietante enconamiento. Partidos con pocas posibilidades en las elecciones han sacado demasiado pecho, como si por esta vía pudieran lograr grandes progresos.
Empresas particulares que operan en el sector de la desocupación exhiben arrogancia. Y algunos okupas muestran una actitud desafiante, pese a la nula base legal de su posición. Ninguna de estas actitudes anuncia nada bueno. El de la vivienda es un grave problema, que requiere esfuerzo y sensatez. Ni las soluciones unilaterales son aconsejables ni el derecho a la vivienda justifica la okupación. A ver si con los cien mil pisos de San Sánchez se acaba con la ocupación, aunque dudo de ambas cosas, de los pisos y del fin de la ocupación.
Un hombre de 54 años se ha suicidado en Paiporta lanzándose al vacío por el balcón de un cuarto piso, justo el día que iban a desahuciarlo. ¿La pregunta es: quien le ha empujado?. Descanse en paz.