Explicaba Josep Maria Espinàs en su columna de ayer en el periodico algo sabido, que escribe todo lo suyo con una máquina de escribir Olivetti, y que le han dicho y creo es cierto que Paul Auster también lo hace. Hasta hace 9 años servidor también usaba la máquina de escribir, una Olivetti Lexicon 80 que aún conservo, y no por que padezca la síndrome de Diógenes que me hace incapaz de tirar nada, sino por qué es posible que algún día tenga que volver a emplearla, esto de la red cada vez está más lleno y no se yo si habrá suficientes nubes para guardar todo lo que se escribe y publica.
El problema de escribir con la MME (Máquina mecánica de escribir) que emplea irónicamente Espinàs para dar un énfasis más moderno al hecho, es que das un trabajo añadido a tu editor, pués no es igual entregar un texto en un CD corregido y compaginado, que una pila de folios dina A4 con tipex incorporado. Peor lo tuvo el editor de John Kennedy Toole, el malogrado genio escribió la conjura de los necios, en trozos de papel usado, de revistas, de papel de water etc, imaginaos la faena.
Pues ya lo sabéis, por si las cosas se tuercen y no disponeis de una en casa, no estaría de más ir a los encantes a adquirir una MME. Nunca se sabe, y de paso comprar sobres y sellos, será tendencia enviar cartas o escritos a los amigos conocidos y saludados como se hacía antes, la correspondencia epistolar de toda la vida.