El icónico rascacielos del EmpireState Building ha cambiado sus habituales luces blancas por unas rojas y blancas que emulan a las de una ambulancia como homenaje a todos los profesionales sanitarios que luchan contra el coronavirus en Nueva York. Esto sucede cada dia a las nueve en punto de la noche, mientras las emisoras de radio emiten New York en la versión de Alicia Keys. Podrian haber puesto New York New York de Frank Sinatra, pero en la situación actual de la ciudad encada más la versión más nueva de Keys, entre otras cosas porqué el New York de Frank Sinatra ya no existe, la ciudad actual, los Estados Unidos de América actuales, ya no són la potencia que tenia solución para todo, el gran hermano vigía y protector de occidente, porque, vista la incapacidad que ha demostrado frente al coronavirus, parte de su prestigio internacional se ha hundido para siempre. Como escribe Pilar Rahola en la Vanguardia, ¿donde está aquel país capaz de hacer un buque de guerra diario durante la Segunda Guerra Mundial? Mientras China ha demostrado una capacidad ingente en construir hospitales, confinar ciudades y dotar de recursos a su sanidad, la gran potencia americana no tiene equipos de aparatos respiratorios, ni material de protección individual, ni nuevos hospitales, y muchos enfermeros y médicos no tienen guantes ni mascarillas. La situación en Nova York parece impropia de una gran potencia. El gran gigante no ha sido capaz, pues, de activar su poderosa maquinaria de reacción a pesar de la evidencia de que la pandemia les llegaría.
¿Cómo es posible que el país con los servicios de inteligencia más avanzados, capaces de tener información privilegiada sobre lo que pasaba en China, y con los mejores laboratorios de virologia del mundo, no haya reaccionado a pesar de tener mucho más tiempo para prepararse? ¿Sabía, antes que nadie, cómo combatían la pandemia en China, en Corea, en Taiwán o en Israel, y no se ha preparado? ¿Y también ha podido ver, con tiempo, los errores cometidos en Italia y en España, y la confusión global europea, y qué ha hecho? Y no es sólo culpa de Trump y sus tonterías, porque aquí ha fallado todo el sistema, y este es un indicador de decadencia muy serio.
Ha fallado Europa y EE.UU. y ha salido adelante China, que lógicamente rentabilizará esta posición de hegemonía. ¿Quién comprará, sino China, las acciones europeas y americanas que bajarán? ¿Y de quién dependemos para el material sanitario? No es EE.UU., sino China, quien dominará el relato histórico. La pandemia está cambiando el mapa geopolítico de manera acelerada. No sabemos cómo será el nuevo paradigma, pero será diferente.
¿Cómo es posible que el país con los servicios de inteligencia más avanzados, capaces de tener información privilegiada sobre lo que pasaba en China, y con los mejores laboratorios de virologia del mundo, no haya reaccionado a pesar de tener mucho más tiempo para prepararse? ¿Sabía, antes que nadie, cómo combatían la pandemia en China, en Corea, en Taiwán o en Israel, y no se ha preparado? ¿Y también ha podido ver, con tiempo, los errores cometidos en Italia y en España, y la confusión global europea, y qué ha hecho? Y no es sólo culpa de Trump y sus tonterías, porque aquí ha fallado todo el sistema, y este es un indicador de decadencia muy serio.
Ha fallado Europa y EE.UU. y ha salido adelante China, que lógicamente rentabilizará esta posición de hegemonía. ¿Quién comprará, sino China, las acciones europeas y americanas que bajarán? ¿Y de quién dependemos para el material sanitario? No es EE.UU., sino China, quien dominará el relato histórico. La pandemia está cambiando el mapa geopolítico de manera acelerada. No sabemos cómo será el nuevo paradigma, pero será diferente.
En efecto: es el momento adecuado para que China se haga con la hegemonía mundial. Y el señor Trump haciendo el ridículo como siempre.
ResponderEliminarUn saludo, Francesc.
Y los rusos frotándose las manos.
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