La Audiencia Provincial de Murcia ha confirmado la condena de dos años de prisión que el Juzgado de lo Penal de Cartagena impuso en mayo pasado a un vecino de Los Alcázares por apoderarse de la bicicleta de una mujer que lo denunció por estos hechos. La sentencia indica que el juez de lo Penal declaró como hechos probados que el robo fue cometido el 6 de mayo de 2007, cuando el acusado, "con ánimo de obtener un beneficio patrimonial ilícito", se apoderó de la bicicleta tras propinar varios empujones y golpes a su dueña.
La resolución judicial condenó al acusado, además de dos años de prisión por el robo, a veinte días de multa, con una cuota diaria de seis euros, porque también vejó a la mujer con frases insultantes. La Audiencia ha confirmado la sentencia y desestimado el recurso que presentó el condenado al considerar que fue condenado en base a unas pruebas que acreditan la autoría de los hechos.
La resolución judicial condenó al acusado, además de dos años de prisión por el robo, a veinte días de multa, con una cuota diaria de seis euros, porque también vejó a la mujer con frases insultantes. La Audiencia ha confirmado la sentencia y desestimado el recurso que presentó el condenado al considerar que fue condenado en base a unas pruebas que acreditan la autoría de los hechos.
Y es aquí cuando me pregunto: ¿si por robar una bicicleta a este hombre de los Alcázares le han caído dos años y veinte días?, ¿Cuántos deberían caerle a Millet o Montull, Matas, etc? Pues ninguno, al final, porque estos han aprendido que para robar hay que hacerlo desde dentro y al por mayor, de manera que cuanto más robes, más difícil es que vayas a la cárcel. Y aunque a Jaume Matas le hayan caído 6 años, su abogado ya ha recurrido la sentencia y estoy seguro que se escapará de ir a la cárcel.
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