VIDAS REBELDES

Con motivo de la nominación de Michelle Williams a los premios Oscar por su trabajo en 'Mi semana con Marilyn', La segunda cadena de TVE ha emitido un documental sobre un período clave en la vida de Marilyn Monroe: cuando quiso dejar de ser sex symbol y empezar a ser actriz. De hecho, Marilyn no necesitaba estudiar para ser actriz, lo era de manera natural. El próximo cinco de agosto se cumplirán 50 años de su muerte y supongo recibirá muchos homenajes, pero hoy quiero hablar de la última película en la que participó, una película maldita: Vidas rebeldes.

Posiblemente Vidas rebeldes no es el mejor título en la filmografía de Huston. Vidas rebeldes es un western crepuscular, con una visión amarga sobre el amor, la soledad y la vejez. Una historia de perdedores, escrita por Arthur Miller, casado en aquel entonces con Marilyn Monroe, en que por encima de todo sobresalía su trío de fracasados ​​protagonistas interpretado a su vez por unos actores ya en la recta final, Clark Gable en su ocaso como actor, y los otros dos por estar en pleno proceso de autodestrucción, Marilyn Monroe y Montgomery Cliff. Para Gable y Monroe Vidas rebeldes supuso su última película, Monty participó en alguna más en papeles secundarios, pero su triste destino también estaba escrito.

El rodaje fue un verdadero desastre: un equipo médico hacía guardia permanente en el estudio para vigilar a Clift y Monroe, que a veces podía retrasarse varias horas antes de estar lista para salir a escena. La película nunca acabó de gustar a los productores y pasa por ser un título inacabado que, por razones comerciales, tuvo que ser terminado por rentabilizar la maldición que pareció haberse cebado en ella. Por eso se suele considerar a Vidas rebeldes como una de las películas malditas de la historia del cine.

El primero en caer fue Gable. El actor murió en noviembre de 1960 - 11 días después de terminar el rodaje - debido a su cuarto infarto. Los rumores decían que el excesivo esfuerzo físico que el actor, de 59 años, tuvo que realizar durante la película, precipitó su muerte, ya que se comenta que tuvo que perder 20 kilos en el rodaje. La mujer de Gable dijo que había muerto a causa de las eternas esperas a que Marilyn sometía a sus compañeros en el rodaje. Bien conocida es la falta de profesionalidad y el egocentrismo de la actriz, pero parece que las esperas no fueron un factor decisivo en el infarto, sino más bien las salvajes dietas a las que el actor se sometía para intentar engañar al tiempo.

Marilyn Monroe fue la siguiente en esta negra lista. El 5 de agosto 1962 la actriz se tomó una mortal sobredosis de barbitúricos. Hoy en día se sigue especulando sobre el caso Monroe en centenares de libros y artículos. Hay para todos los gustos, los que relacionan los Kennedy en el siniestro asesinato de la actriz, los que culpan a la propia Monroe y su inestable personalidad y hasta los que hablan de la intervención de Edgar Hoover por las relaciones de Marilyn con diversos comunistas. Lo que está claro es que fue víctima de su propio mito. Si alguien mató a Norma Jean, ésta fue Marilyn.

El último damnificado en esta triste y siniestra historia fue Montgomery Cliff, uno de los mejores actores de su generación, y una de las personas más autodestructivas de la meca del cine. La propia Marilyn lo definió como "la única persona que conozco que está en peor forma que yo". El inmortal actor de El Heredera (1949) y De Aqui a la Eternidad (1953), era uno de los mejores exponentes de los actores del método y una persona atormentada. Al final en el que se conoce como "el suicidio más lento de Hollywood" acabó contrarrestando su angustiosa vida - ocultando, entre otras cosas, su homosexualidad - con pastillas, alcohol y visitas a los peores antros gays de Nueva York. Murió el 23 de junio de 1966. Aunque su breve aparición en Vencedores o Vencidos (1961) mereció que fuera nominado al Oscar como mejor actor secundario-ya había sido nominado como actor principal en tres ocasiones-, se suele considerar que Vidas rebeldes fue el Su último papel importante.

Vidas rebeldes fue la trágica despedida de tres grandes actores de muy diferente estilo y un filme que agrandó aún más la oscura leyenda de sus protagonistas.