Habla Antoni Puigverd en su columna del digital de la Vanguardia de ayer del jamón ibérico Joselito y de que considera que es mejor comerlo con pan con aceite, sin tomate. No he tenido el placer de probar nunca el Joselito pero si buenos ibéricos, sobre todo en Madrid donde de hecho te los sirven junto con rebanadas de pan untado sólo con aceite de oliva. Habla de más cosas el Sr. Puigverd sobres los ibéricos.... Su comentario me ha recordado este hace tres años ...

"Me apetece hablar de esta cuestión o puntualización gastronómica, que puede parecer menor, pero que ni mucho menos lo es. Hablaba el otro día con un compañero que me decía que a él le gustaba el pan tostado untado con tomate y jamón de 5 jotas, de Jabugo, ¡vaya!.

Lamento disentir de ti - le dije - y como experto en pan con tomate después de cenar casi cada día durante 42 años, esto, pan con tomate y embutido o a menudo jamón, quiero manifestar en primer lugar, que tostado y con tomate no me gusta tanto y dos y muy importante, si el jamón es bueno de verdad, no hace falta que sea un 5 J, si es necesario (pero con frecuencia no se puede, quería decir), como decía si el jamón es bueno, me gusta mucho más con pan sin tomate, con aceite de oliva y basta. Tengo la manía o así me parece que el tomate le quita sabor al jamón, como si la superposición de sabores se mezclaran en detrimento del sabor del jamón.

De hecho, quizá lo que no se debe hacer es un bocadillo con jamón del bueno, tal como está en el plato de la fotografía cortado a lonchas muy finas y acompañado de pan untado con aceite es cuando está más bueno, de hecho, lo que es más sabroso de este jamón es la grasa, aquella grasa aceitosa que te impregna la pituitaria con su olor mientras te pringas los dedos de la grasa que desprende y el paladar se deleita en probarlo. ¡Caramba! me entran ganas de comer.

Ahora, todo es cuestión de gustos, conozco uno que de joven se hacía pan con tomate y encima ponía cola-cao y luego jamón y decía que estaba muy bueno. Ah! y para comer el jamón bueno me gustan más las rebanadas de barra de cuarto que no el pan de payés. Manías mías, o no, por lo que veo."