EL MEJOR RELOJ QUE HAIGA

Una ocasión especial, como la del sorteo de la nueva Champions, ha servido para que Cristiano Ronaldo sacara o sacara a pastar sus mejores galas. El futbolista asistió enfundado en un traje impecable de doble botonadura con camisa blanca y sin corbata. Un estilismo en el que, sin duda, las joyas fueron las grandes protagonistas. El futbolista recuperó de su joyero uno de los relojes más caros, un Franck Muller Cintrée Curvex exclusivo, valorado en 1,5 millones de euros. Puedo entender el alarde ostentoso y ramplon de Cristiano, si me atengo a sus humildes orígenes en la isla de Madeira. Lo cierto es que de una cosa he pasado a otra y me ha venido a la cabeza que después de la guerra e incluso cuando SEAT empezó a fabricar coches como el SEAT 900, el 1400 o el popular 600, la gente no decíamos coche, sino "auto", o "automóvil", y en estas que estaba yo cuando el cerebro que a menudo parcela por su cuenta me ha hecho venir a la cabeza la palabra "Haiga" que era así como se llamaba a los autos de lujo o grandes. No sabía el porqué de esta curiosa definición y acudiendo a San Google lo he encontrado, y no era como se pensaba que venía del inglés. Aquí encontrará el origen de la palabra: "Poco después de finalizar la Guerra Civil española (1936-1939) empezaron a circular por las carreteras los últimos y más caros modelos de automóvil de la industria extranjera, a los que la gente llamó haiga. Este nombre nació en Madrid basado en una anécdota con la que se trataba de ridiculizar la incultura y el origen plebeyo de quienes, enriquecidos por la guerra, comenzaban a airear a los millones conseguidos gracias al estraperlo y el mercado negro. Aquellos nuevos-ricos eran ignorantes y toscos, y se decía que cuando compraban un automóvil, no preguntaban ni por el precio ni por la marca, solo exigían con chulería "el más caro que haiga". de ahí pues la expresión 'Haiga'. Por cierto, el reloj de Franck Muller no puede ser más feo.